viernes, 10 de febrero de 2017

NOS JUBILAMOS EN GRANADA

Hola a tod@s!!!!
Hacía casi 4 años que no nos escapábamos. Suena fuerte; sí, incluso a mi me suena tremendo…

Cuando me casé recuerdo prometernos una semana para nosotros aunque los niños llegasen, luego cuando Fer nació la promesa cambio. La intensidad del primero  hacía difícil llenar las maletas y si planeábamos era con él, podían las ganas de enseñarle el mundo. Ahora, quizá estos años han servido para darnos cuenta de que nosotros también nos necesitamos, es el momento de  tener 48 horas para estar solos. Horas en las que disfrutas del silencio, de dormir, de imaginar y también de recomponer. Dejar de ser padres, marido y mujer y ser novios….
Y con el cumple llego el destino GRANADA!!!!
Ayyyyyy que razón esas palabras de Francisco de Icaza…
 Dale limosna, mujer,
que no hay en la vida nada
como la pena de ser
ciego en Granada.
La verdad que pocos fallos ha tenido este viaje…. sino cuento que aun con navegador tenemos la desgracia de perdernos en la llegada a destino siempre. Esto supone varias cosas; que te haces una percepción de la ciudad, que pasas por el mismo sitio varias veces, que te ríes y te enfadas a partes iguales pero que al final llegas.

                                                              www.granadafivesenses.com

Elegimos como  Hotel, Granada five senses rooms and suites. céntrico, nuevo, con gente encantadora….





super-desayuno y piscinita en la azotea para refrescar después de día intenso de turisteo.


No harás largos ni mucho menos. Pero a las 7 de la tarde después de no parar casi ni para comer, la tumbona, el agua y la cerve es la mejor combinación para saber que todavía te queda mucho más por hacer y ver. 


¿El plan de finde?. Sencillo, 48 horas dan para lo que dan….  Iniciamos con paseo nocturno al borde del rio Darro; tiendas cuya única luz es la que desprenden sus pequeñas lámparas,


otras originales, títeres, unos que tocan, otros que bailan



y entre todo ello numerosos sitios en los que disfrutar de la caña y la tapa.

Al día siguiente ella nos esperaba la Alhambra, la roja. Esa que debe su nombre al rojizo de sus torres y murallas, esa a la que accedes por la puerta de la justicia


y que guarda una leyenda en dos detalles de sus arcos; La mano y la llave. Cuentan que debajo de esa puerta hay un palacio en el que un astrólogo árabe tiene hechizada a una bella cristiana. Cuando el hechizo se rompa la mano cogerá la llave y desaparecerá la Alhambra.


Podría escribir mucho de lo que nos contaron y de lo que aprendimos pero solo os enseño un poquito.

Patio de los Arrayanes

Salón del Trono

Sala de los Abencerrajes

Palacio del Partal

Jardines del Generalife


Como los grandes tesoros lo mejor es buscarla y descubrirla……

Y el calor hizo necesaria la parada 



y allí a la derecha el Hotel América nos dio paso a un patio fresco en el que coger fuerzas,


en el que millones de objetos estaban dispuestos no porque el lugar fuese el estudiado para lucirse sino porque ese era su orden de llegada.



Y así despedimos 3 horas intensas para perdernos por El Albaicín; un laberinto de calles empinadas, estrechas, blancas,




nombres divertidos y allí yo y mi cámara, mi marido,


el hambre y el mejor de los sitios El Huerto de Juan el Rana.

                                                         www.elhuertodejuanranas.com



Gracias por ser los culpables de mi nuevo amor al salmorejo nunca olvidaré ese sabor ni tampoco vuestra terraza.


Y bajamos de nuevo a la realidad; dejamos por un rato esa Granada con olor a pueblo, a herencia y esencia que había puesto en nuestras bocas una frase que hoy de vez en cuando nos decimos -Nos jubilamos en Granada-






y  llenos de esa intención volvimos a despedirnos, a verla de noche a cenar con ella , con luz, con vino…. entre geranios y gentío en Carmen, Mirador de Axía!!!!.





                                                              www.miradordeaixa.com

Ellos, la carta, el sitio superó la recomendación. Y aunque no queríamos despedirnos sabíamos que el tiempo se agotaba


y paseamos despacio; perdiéndonos a posta, parando para alargar la noche, suplicando solo un poco más.





 Pero siii, termino, llego a su fin  entre últimas compras por la Alcaiceria ,


La Alhambra contada a los niños.

entre últimas visitas y dos promesas; volver para quedarse y entre tanto y no, como una amiga me enseño; darnos una hora al día para charlar, un finde al mes para soñar y una semana al año para recomponer y volver a ser novios otra vez.


Hasta entonces aquí sigo.BE


















































































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